CINTRUÉNIGO Aprovechando
las fiestas patronales de Cintruénigo hemos decidido dar un pequeño paseo
por sus calles y monumentos, para después poder disfrutar también de la
fiesta. Las fiestas, de hecho, se pasan en la calle y eso vamos a hacer.
Dentro de esta localidad de 5483 habitantes podemos encontrar dos edificios
religiosos; la Parroquia de San Juan, que comenzó a construirse en el siglo
XVI, sufriendo diferentes etapas constructivas que llegaron a prolongarse
hasta finales del XIX y la Basílica de la Purísima, iglesia de estilo
manierista de la primera mitad del siglo XVII. Pero lo que más destaca en
Cintruénigo son sus edificios civiles y casas señoriales, aunque algunos
están un poco deteriorados. La Casa Ligués, un edificio neoclásico de tres
cuerpos y ático, una casa que sigue la moda que impusieron las
construcciones cortesanas en el siglo XVIII. Casa Señorial, un edificio
barroco del siglo XVIII, con escudo de alabastro, que ennoblece más la
construcción. La Casa de Navascués, una casa barroca del siglo XVII que
luce, en su centro, un escudo del mismo siglo. Los días de visita son lunes
y martes y es necesario llamar al Ayuntamiento para concertar la visita. El
actual centro parroquial es un edificio del siglo XVIII, retocado en el
neoclásico, o el Ayuntamiento, edificio que preside la Plaza de los Fueros,
de estilo neoclásico del siglo XIX. Pero también se pueden disfrutar de
otras muchas cosas en esta localidad ribera, como los paseos por la ribera
del Río Alhama. Desde el puente se puede observar el Paretón, un corte
natural que servía de punto de partida a las antiguas murallas de la villa.
En uno de sus extremos se encontraba la torre de vigilancia de la ciudad,
desde donde se accedía a la ciudad. Posteriormente esta torre se convirtió
en la ermita de Santa María. Ya que estamos de fiestas no olviden disfrutar
del vino de Cintruénigo.
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